sábado, 31 de julio de 2010
SAHUMERIOS
Tengo una "nariz" excelente.
Los olores me fascinan.
Recuerdo de mi niñez el perfume que desprendía el "brasero" de nuestros vecinos Juan y Charo porque ella incorporaba"alhucema".
En Semana Santa, el olor a incienso, no falta en mi casa. Forma parte del ritual pagano.
En El Rocío, en Navidades, el olor que deja en la ropa la chimenea, me recuerda al olor del pueblo gitano y sus hogueras.
En nuestras fiestas Colombinas, mi hermana Yolanda me ha hecho recordar el olor maravilloso de los buñuelos realizados por esas mujeres gitanas hermosas y elegantes que trabajan con una sonrisa e incluso cantando hasta altas horas de la madrugada.
A Rocki, el olor del "NAG CHAMPA" no le hace gracia ni tampoco las colonias ni el esmalte de uñas.
Sin embargo, una buena "caña de lomo" o un "buen jamón" no sólo lo huele a distancia sino que enseguida baila sobre sus dos patas traseras pidiendo la ración que le pertenece y que Jose no se resiste a darle.
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